Entre tus viajes de tintas y rostros aterricé en tu mundo.
Apenas has salido a mi encuentro y he saltado a tus brazos;
Has decidido quedarte, así, con esa confianza del que nos conoce.
He despedido a los fantasmas, mis plantas muertas son abono.
La magia de tu voz dibuja la silueta de un nuevo ciclo, juntos.
Tiemblan mis dedos ante nuestra posibilidad. Nace un Te quiero.
Ha habido otros infiernos, pero este es el nuestro; La incertidumbre.
El encierro, la fatiga de la nada. Los sueños e insomnios de los días;
Vencemos a pulso las horas con la valentía de la locura e insumisión.
Ven; huye conmigo que corto la maleza y recupero nuestra tierra;
Que me deleito del misterio de tu luz y sombra entre la música y tu
piel.
Akabal; dibuja también mi amanecer y oscuridad, que yo te veo.
Mycrisher