En medio de mis preocupaciones incoherentes debo confesar que hay una nueva que anda rebotando por ahí:
Hace tiempo que no siento la fuerza de un abrazo...
Es extraño porque me considero una persona afectiva y los abrazos son lo mío o al menos lo eran. Espero sea pasajero. Se podrá perder la capacidad de sentir un abrazo, ¿se podrá perder la espontánea sensación liberadora y fraternal de darlo?
Todo es susceptible de versele perdido, si no se le cuida
ResponderEliminar