Nunca se termina de aprender
Cuando pienso en música, generalmente pienso en universalidad, si pienso en pasado musical pienso en las famosas canciones de los 80 "what a feeling" o en las de mi infancia.
El 30 de abril de 2014 en el Teatro de Cámara del Centro Cultural Miguel Ángel Asturias se llevó a cabo un concierto dónde se representaron canciones guatemaltecas del Siglo XIX. El Doctor Igor de Gandarias se dio a la hermosa tarea de recopilar canciones que de otra forma nunca hubiéramos conocido y mostrarnos cómo la cultura e identidad de un país se puede ver a través de la música.
Comparto la introducción del programa impreso y una de mis canciones favoritas. Ahora lo importante sería encontrar alguna forma de grabarlas o subirlas a la red para que otros puedan también disfrutar de ellas.
"La Canción Popular en Guatemala durante el Siglo XIX
Este concierto presenta una muestra seleccionada de canciones de los ámbitos cívico, religioso y recreativo que representan el sentir popular guatemalteco del siglo XIX. El programa se divide en cuatro partes. La primera ilustra la música destinada a ser cantada por niños, iniciando con el villancico de indios:
los musiquero, tipo de pieza surgida durante la colonia que representaba, en forma jocosa, características culturales del indígenas según la visión dominante europea. Resalta el texto, que imita el habla indígena del español. Junto a las tonadas de Pascua se practicaba en templos y casas particulares. El can escolar
El juego de los niños, con ritmo de polca, documenta la influencia de la música de salón en la música escolar de fines del siglo. Esta canción y el himno
La Escuela forman parte de repertorio que buscaba exaltar valores nacionales y cívicos en los infantes.
La segunda parte presenta tres de las formas más populares de expresión musical que tenían vigencia en los templos, mostrando la intervención de elementos profanos.
En Belén está la gloria ejemplariza el alegre villancico de Pascua con ritmo de son de fines de siglo. De la misma época es el
Ave María de Valentín La Fuente, tipo de canción conocida como "de relleno", merced a que el texto tradicional era modificado introduciendo fragmentos poéticos escritos por los autores. Finalmente escuchamos la contrafacta
Tú que llenas de los dones, la cual es un arreglo "a lo divino" realizado a mediados de siglo por Albino Paniagua, sobre un aria operática de Gioachino Rossini.
La tercera parte del programa contiene cinco tonadas eróticas de corte dolorido romántico, de mediados del siglo. Estas piezas amenizaban tertulias (reuniones de tarde) en casas de gente acomodada, donde a más de cantar y tocar instrumentos (piano o marimba) se comía, bebía y se jugaba a los naipes.
La cuarta y última parte del programa la conforman tres canciones criollas con ritmos latinoamericanos de moda e fines del siglo, como el bambuco colombiano, la danza cubana y el paso doble local.
Igor de Gandarías"
Esta fue la canción que me gustó:
14. Lago de Amatitlán. Two step
Julián Paniagua (1856-1946)
Mezzosoprano y piano
Era un domingo con mucho afán/
tomaron tren las Ninfas para Amatitlán./
Qué hermoso es el lago / que lindo es nadar /
y bellas muchachas con gran alegría se van a bañar.
Después del baño dulce impresión/
deseando copas se dirigen al salón/
al oír la marimba bailan como están/
parejas se abrazan, otras se besan y bataclán.
Despues del baile almorzar/ con la novia es de rigor/
mojarritas con chuchitos y chiles rellenos de amor./
Al fin regresan tristes ya/ criticando a la reunión/
pero pasaron feliz día ¡ay, ay!, todo fue ilusión
----
Cantantes:
Soprano: Leslie Gonzalez, Mezzosoprano: Ada Chitay
Tenor: Christian Polonsky, Barítino: Sergio Alvarado
Instrumentistas:
Violines: Juan Andrés de Gandarias, Iunuhé de Gandarias
Violonchelo: Guillermo López, Piano: Vinicio Quezada
Guitarra: Pedro Lázaro, Flauta: María Eugenia Amato